La tecnología no sólo debe ubicarse como una poderosa
herramienta de trabajo para la empresa; también, debe
trabajarse como una palanca en la propuesta de valor y en la
estrategia de la compañía.
La tecnología cataliza los 5 cuadrantes sustantivos de la
compañía: la dirección, el equipo humano, los procesos, el
mercado y las finanzas.